1983. Fue el año para Piura. Un año inolvidable. Ese año apareció probablemente el peor Fenómeno del Niño. Nunca como en ese tiempo estuvimos sometidos a tanta desgracia. A tanto dolor. Llovía doce, catorce, dieciocho horas diarias. Llovía todos los días. Con todo empezamos nuestras clases. Empezaba a estudiar el 4to de Secundaria. Tenía 15 años de edad. Y aún así íbamos al Colegio “Don Bosco”. Cada semana cada año iba a Misa y le pedíamos con el alma que pararan las lluvias a nuestra Madre María Auxiliadora. Las oraciones en el patio eran dirigidas a pedirle que interceda ante su Santo Hijo y ordenara el fin de las lluvias. Cuando llovía las oraciones las hacíamos en el aula.

Piura ama a María. Piura es mariana. El 24 de mayo salimos en procesión. El 23 de Mayo no llovió. Y el 24 estaba despejado. Salimos en procesión. Y oramos caminando como nunca. La gente se aglomeraba en cantidad. Y  llorando las madres, los hijos, los padres le pedían : “Madre ten compasión. Intercede ante tu Santo Hijo que tenga piedad de nuestra Piura”. Cuando íbamos a media procesión se desató una tormenta como la que hemos vivido estos días. La cubrimos a nuestra Madre del Cielo con un paraguas. Y seguimos avanzando. Llegamos al Colegio mojadísimos. No paramos jamás de orar. De cantar.

Las lluvias siguieron los siguientes días. El 01 de Junio la sacamos al patio del Colegio. Le pedimos con toda el alma. El pueblo de Piura nunca como esos días iba a la novena. Oraban el rosario. El 05 de Junio de 1983. 7 meses después de iniciada la tragedia paró de llover. Así sin más ni más. Nunca olvidaré eso en mi corazón y en mi mente. Oremos a nuestra Madre del Cielo. Bajo cualquier título o advocación. Yo como Salesiano le pediré bajo el título de María Auxiliadora. Les ruego a todos los salesianos que lo hagan. Le pido a toda Piura Mariana que ore como oraron sus padres, tíos, hermanos y abuelos en 1983. Verán lo que son los milagros de Jesús. Después de todo se lo pediremos a su Madre. ¿Qué hijo le niega algo a su madre?. Ni más ni menos.